Ambientada en un mundo élfico, 1200 años antes de los eventos de The Witcher, The Witcher: El Origen de la Sangre cuenta una historia perdida en el tiempo: la creación del brujo prototípico y los eventos que llevaron al momento crucial de la Conjunción de las Esferas, cuando los universos de los monstruos, los hombres y los elfos se fusionaron en uno.
La serie de cuatro partes cuenta con la supervisión del showrunner y guionista Declan De Barra, la dirección de Sarah O’Gorman y Vicky Jewson y la producción ejecutiva de Lauren Hissrich, Matt O’Toole, Platige Films (Tomek Baginski & Jarek Sawko) y Hivemind (Jason Brown & Sean Daniel).
Al elenco sensacional del universo de The Witcher se unen Sophia Brown y Laurence O’Fuarain como Eile y Fjall, dos guerreros separados de sus tribus opuestas; Michelle Yeoh toma el papel de Scian, maestra en las artes de la espada y la última de su tribu; Mirren Mack es la princesa Merwyn, Lenny Henry es el Chief Sage Balor y Minnie Driver es Seanchai. Francesca Mills es Meldof, Zach Wyatt y Lizzie Annis son los gemelos celestes Syndril y Zacare. Huw Novelli es el Hermano Muerte.
El elenco adicional incluye a Amy Murray como la aprendiz de Balor, Fenrik; Mark Rowley como el rey Alvitir, Daniel Fathers y Faoileann Cunningham como Osfar y su hija Ryl. Kim Adis es la sirvienta de Merwyn, Ket; Nathaniel Curtis es Brian, Dylan Moran es Uthrok One-Nut y Hebe Beardsall es el plebeyo Catrin. Ella Schrey-Yeats interpreta a la joven profeta Ithlinne y Claire Cooper a su madre, Aevenien.
'The Witcher: El origen de la Sangre' cuenta una historia perdida en el tiempo